jueves, 30 de agosto de 2012

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Que forma más hija de puta para arruinarme el día, es increíble que no me quieras creer y por defenderme me traten mal. Es una idiotez, solo una caída y se van en mi contra inmediatamente ¿no me puedo equivocar de vez en cuando?
FUCK OFF!

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Me siento un poco desilusionada de aquel que me dijo que detestaba a quienes decían "Te Amo" sin realmente sentirlo y ahora verlo decir y gritar te amo a alguien con quien lleva menos de un mes... realmente patético. Solo espero no caer en lo mismo.

miércoles, 8 de agosto de 2012

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Dejo la hoja en blanco por si un día decides cambiar el final. 

Original: Vía Tumblr.

domingo, 5 de agosto de 2012

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Extraño sentir esas mariposas en el estómago que te hacen sentir estúpidamente bien


viernes, 3 de agosto de 2012

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No todas las princesas llevan vestidos elegantes de color rosa y zapatos de cristal, algunas van por ahí con sus polerones anchos, lentes nerds, sus auriculares y un cigarillo en la mano, pensando en las heridas que algún idiota les causó

Adaptación - (Extracto Original)

jueves, 12 de julio de 2012

Un breve paseo


Miércoles 11 de Julio, me encuentro en la Universida Alberto Hurtado ubicada en Almirante Barroso 10 —en pleno corazón de Santiago—, en compañía de varios adolescentes más —la gran mayoría son estudiantes de tercero y cuarto año medio.

Son las 15:09 horas y nos encontramos en este momento en el taller de Reporteros, hace solo unos minutos estabamos todos sentados y completamente ordenados en una sala de clases, y ahora estamos totalmente dispersos en el campus, en busca de una historia que podamos redactar.
Hay tanta gente, cada una con su historia, lo que nos deja con demasiados puntos de vista ¿cómo saber cuál elegir? Y entonces una idea llega a mi: aprovechar mi propia perspectiva, redactar mi historia; de esta forma comienzo a dar vuelta por las intalaciones del recinto, en busca de un lugar donde pueda ponerme cómoda y al mismo tiempo recibir los rayos del sol; entonce slo veo, un pequeño espacio en el pasto en dónde logro absorver la vitamina D que busco.

A un costado de donde me ubico, varios estudiantes de la universidad charlan animádamente sobre películas, otros tratan de estudiar, mientras que terceros simplemente descanzan. En Diágonal a mi posición actual, puedo ver a los chicos que se encuentran en el taller de antropología y de paso alcanzo a escuchar algunas palabras del guía de dicho grupo, pero a mi oído solo llegan ideas sueltas como: “esta palmera que se encuentra a nuestro lado”, “a pesar de que nos encontramos cerca de la plaza de armas” y algo sobre la Plaza Brazil que no consigo comprender del todo. También puedo ver a mis compañeros de este día sentados mientras piensan que escribir, otros dejándo que su lápiz exprese las ideas que llegan; o simplemente caminando en busc de una historia, quizá sin siquiera pensar o imaginar que aquella muchacha sentada en el pasto con cuaderno y lápiz en mano escribe sobre ellos.

De pronto una pareja de amigos pasa celebrando que aprovó un ramo con una nota suficiente para no dar un exámen “¡excelente! —pienso para mis adentros— una preocupación menos para ellos este semestre.” Así es como me vuelvo a dar cuenta que las historias ocurren a cada momento ¿quién soy yo para quitarle importancia a los sucesos que ocurren en la vida de los demás? Es entonces cuando más me gusta mi idea y disfruto poder escribir una columna desde mi punto de vista actual, contando mi historia, que en este preciso momento se mezcla con la de los demás sin que ellos lo sospechen; encerrándome en mi burbuja personal de escritura, pero sin aislarme por completo.

¿Cuánto sucede en un par de minutos? Si esto y más ocurrió solo en 
el campus de una universidad ¿Qué hay del resto de Santiago? ¿Y del país? Y pensando más en grande ¿Y en el resto del mundo? Miles de historias suceden simultáneamente y no somos conscientes ni quiera de una millonésima parte de estas.

Finalmente llego a una conclusión que me gustaría compartir: “Debemos tomar en cuenta las cosas pequeñas de la vida, disfrutar cada momento y ¿por qué no? Poner un poco más de atención a nuestro alrededor… podría sorprendernos las cosas que descubramos.”

miércoles, 9 de mayo de 2012

... Algo sin importancia



Que tus amigos y tu familia sepan que te pasa algo y no sepan que hacer para subirte el ánimo.

Ser de esas personas que en vez de decir "si no lo tengo, nadie lo tiene", y decir "si no lo tengo, no quiero nada" para mi es él o nada...

Me duele pensar en el, mi corazón duele... porque me enamoré de él, he ahí mi error, enamorarme... ahora ya no puedo dar un paso atrás, mi corazón le pertenece y por muy roto que este... sigue estando en su poder.

Ser un Zombie es mi presente, espero poder sobrellevar esto y volver a ser la Poly de siempre, pero no puedo prometer nada, porque siento que ya nada me importa, nada me motiva... simplemente ya nada es lo mismo.

Lo siento, me duele amarte, pero ni por eso dejaré de hacerlo.

miércoles, 11 de abril de 2012

#La Prueba

Llevaba alrededor de un poco más de media hora encerrada en el baño, sentada sobre la tapa del inodoro con aquella pequeña pero alargada cajita en sus manos, solo el tenerla entre sus manos ya la tenía algo nerviosa, no quería ni saber cómo sería cuando la abriera y la ocupara, mucho menos cuando estuviera esperando para ver el resultado que aquella prueba diera; y es que ya tenía un mes y medio de retraso, y los mareos y nauseas durante la noche y al despertar no la hacían sentirse mucho mejor, tenía miedo, era joven aún… acababa de cumplir los 17 años y ni siquiera tenía novio, ella solo tenía sexo casual con Chris, siempre con protección… el problema fue que no contaban con que la última vez el condón se rompiera y no se dieron cuenta de esto hasta que fue demasiado tarde.

 En un principio se asustaron, pero luego se relajaron ya que ¿Qué tanta mala suerte podían tener como para que esa única oportunidad por agentes externos ella quedara embarazada? Es decir, ¿cuáles eran las posibilidades de que aquello les pasara? Pero ya había pasado el tiempo y cada día que pasaba Paige sentía que era una tortura, nunca había querido tanto que aquel sangrado que llegaba mensualmente llegara para decirle que todo estaba bien, pero por más que los días pasaban este no llegaba y ella solo se asustaba más y más. Hasta que aburrida del miedo y la preocupación decidió comprar el dichoso test de embarazo que se encontraba en sus manos en ese momento, esperando para ser abierto y hacer aquello en lo que era bueno, aquello para lo que había sido creado.

— Tranquila, mientras más rápido lo hagas más rápido sabrás la respuesta —se decía a sí misma.

Tras estas palabras de apoyo tomó una bocanada de aire y abrió la caja, busco instrucciones, las leyó tres veces para estar completamente segura de todo y simplemente lo hizo, después… se lavó las manos y con aquello que parecía un palito se fue directo a su habitación, lo dejó sobre su escritorio y encendió el ordenador para poder relajarse un poco con algo de música, quería algo tranquilo, movido, pero lento a la vez… reconfortante, que la hiciera sentir mejor y ¿por qué no? Hacerla sentir identificada y a salvo… por lo que simplemente buscó entre sus artistas Pop hasta que encontró algo.

De pronto un simple “pop” la asustó casi al punto de llegar al techo, había olvidado por completo que tenía su facebook abierto, por lo que cualquiera de sus amigos podía hablarle por el chat.

¿Qué hay Cariño?” Es lo que decía a un costado de una foto del ejercitado y perfecto abdomen de Chris Sumpter. “Ahora no” fue lo único que respondió la joven… solo debía esperar unos minutos a que apareciera un signo en un cuadradito blanco de aquel test… ella solo pedía ver un guión, un signo menos, tan solo una raya… eso significaría que todo estaba bien, que podía relajarse y simplemente seguir su vida como si nada de esto jamás hubiera pasado, pero el destino tenía algo más planeado para ella, ya que pasado el tiempo establecido se comenzó a asomar aquel signo que daría vuelta completamente su mundo, en color rojo, como queriendo haciéndole notar mucho más lo importante y aterrador de todo aquello había aparecido una cruz, un signo más… simplemente… estaba embarazada, en otras palabras, estaba totalmente jodida.

We Found Love



"We found love in a hopeless place"
Creo que esa es la frase que ha marcado mi día a día últimamente, una frase que está siempre presente de alguna forma... aunque de una u otra forma puede que deba modificar la letra de esta canción para dejarla como "I found love in a hopeless place" porque aunque duela admitirlo... solo fui yo la que realmente calló.
Esta canción fue analizada muy a fondo el día de hoy, para un trabajo... y sentía que cada conclusión que sacaba era un nuevo puñal que se clavaba en mi corazón y otro en mi espalda. Un amor tóxico... un amor que daña... un amor que al fin y al cabo, sin importar los buenos momentos y las sonrisas que te saque, te hace sufrir de todas formas, en amor que enferma... eso era lo que yo tenía, un amor que de una forma u otra fue un error, uno que lamentablemente no tiene remedio.
"Love and life I will divide"
Y finalmente eso fue lo que hice, separar... elegir... gracias a mis amigos elegí lo más sensato y aunque quizá jamás olvide todo lo que pasó... aprenderé a vivir sin él... me acostumbraré a volver a lo de antes, no puedo hacer como si nada hubiera ocurrido, pero él tampoco es mi mundo y jamás lo fue, por lo que no es ni imposible no impensable el alejarme de él, pero si es difícil... en especial por la adicción que terminan causando los amores tóxicos como estos, pero para toda adicción hay un tratamiento... 
Personalmente, creo que estoy en rehabilitación, casi curada.


jueves, 9 de febrero de 2012

Arsh!

En este momento simplemente escribo para descargarme y es que en este momento estoy enojada, estoy estresada, estoy harta y es que no se por qué es que nada me está saliendo bien… Si bien conseguí que mi papá me diera dinero para el torneo que me dieran el permiso, poco a poco todo se me va a la mierda por una simple confusión y falta de información… a eso hay que sumarle que hace un tiempo quede con un amigo para juntarnos a tomar un café, luego decidimos reemplazarlo por un helado, pero ahora sale mi papá con que no, que blah blah blah, no sé con qué cara me dice que no he hecho nada en la casa si llegamos el domingo de nuestras vacaciones, el lunes barrí el patio, lave la loza y pues el martes… el martes salimos a comprar unas cosas para el colegio, a ver unos papeles y weas así… Después al llegar a casa almorzamos, después de lo que lave la loza y me cambié de ropa debido a que decidí volver a las clases de Taekwondo. ¿Cómo quiere que haga algo? ¿En qué momento? Y sí hice cosas, otra cosa es que no las reconozca.

Lo encuentro injusto, solo íbamos a salir a comer un helado, le pedí permiso para salir una hora, juntarme con un amigo, cosas ordinarias que hago normalmente… De verdad que quería juntarme con él mañana, hablar un rato, comernos ese rato mientras tocábamos ciertos temas que tenemos pendientes hace un tiempo.

Por otro lado trato de relajarme… si después de todo también quedamos de juntarnos el sábado porque tenemos una junta con varios amigos más… entonces lo alejaré un poquito del resto y hablaremos lo que debemos hablar y si se da la oportunidad tomarnos aquel café o comernos aquel helado…

Aunque aún así, no puedo evitar que esa fierecilla dentro de mí se enoje, se mueva de un lado para otro con ganas de romper cosas, gritar una que otra estupidez, pero no debo, trato de controlarme pero me da rabia.

Normalmente no me molestaría si se tratara de juntarme con otra persona como una de mis mosqueteras, porque igual con ellas hablo más seguido, nos vemos más… pero esta ocasión me molesto mucho más porque era una persona especial y cercana que ha sabido ganarse mi cariño y mi confianza pero que lamentablemente no he tenido demasiadas oportunidades de vernos las caras, hablamos horas por chat, horas por teléfono, por cámara y otras cosas… pero… bueeeh

Lo mejor será relajarme, respirar, tranquilizarme y simplemente esperar al sábado, solo un par de días más… Aunque me gustaría volverme un dinosaurio y poder gritar Raaaaaawr

martes, 7 de febrero de 2012

~ Todavía Te Amo - Capítulo 2


- ¿Mina? –escuchó que alguien susurraba
La joven se dio la vuelta y lo que se encontró frente a ella a penas lo podía creer, no le daba crédito a sus ojos.
- ¿Tyler? –fue lo único que pudo decir
- ¿Monique? ¿De verdad eres tú? –respondió el chico que se encontraba frente a ella
- ¡Ty! –gritó emocionada tirándose sobre él para abrazarlo y es que hacer aquello era inevitable en especial después de haber estar 4 años lejos de él, pensando que probablemente no lo volvería a ver.
- ¿Monique?
- ¿Es lo único que vas a decir? ¿Monique? ¿Monique? ¿Monique? Sí, soy yo –dijo la muchacha con una sonrisa grabada en el rostro por la felicidad de volver a ver a su querido amigo Tyler.

Aquel muchacho no había cambiado mucho, es decir estaba más alto, sus rasgos eran más maduros y su voz había cambiado, pero aquellos rizos que se formaban en su cabello seguían siendo tan sexy y esponjosos como lo eran la última vez que lo había visto, sus mirada seguían igual de hermosa y penetrante, así que realmente no había cambiado mucho.

- ¿Monique? ¡Es decir! ¡Mina!
- Ya deja de repetir mi nombre y mi apodo también. –dijo mientras reía nerviosa.
- Lo siento, es que… es que no puedo creer que realmente seas tú…
- Pues créelo, soy yo.
- ¡Ay Mina! Te extrañé tanto.
- Y yo a ti –Smith volvió a abrazarlo.
- Pero… ¿Cómo estás acá? Creí que estabas en Estados Unidos
- Ah pues… tomé un avión que me trajo hasta Inglaterra, en el aeropuerto más cercano, entonces cuando bajé, fui por mis maletas, después de lo que tomé un taxi que me trajo hasta mi casa, deje mis cosas allí, luego caminé unas cuadras y…
- No tonta –la interrumpió riendo- me refiero a ¿Por qué estás acá? ¿Qué estás haciendo? ¿A qué viniste? ¿Por cuánto tiempo?
- Si quieres que me vaya, solo dímelo –en ese momento Monique esbozó una sonrisa, pero se le estaba oprimiendo el pecho solo al pensar que Tyler le pidiera que se fuera, que le dijera que ya no la necesitaba en su vida, que no la quería, que jamás lo hizo.
- ¡No! ¿Cómo crees? Espere tanto tiempo que pasara esto que ahora apenas puedo creer que te tenga de nuevo acá frente a mí –respondió para el alivio de la castaña.
- Fueron unos largos 4 años
- Definitivamente, pero ¿me vas a responder?
- Ah claro –dijo recordando el resto de las preguntas que le había hecho su amigo- pues vine de vacaciones.
- Entonces… ¿volverás a irte? –de pronto apareció un pequeño atisbo de tristeza en su rostro, aunque Monique no estaba segura de que fuera así.
- No lo sé… la verdad es que me gustaría buscar un lugar donde estudiar acá, ya soy mayor de edad y tengo una casa acá así que no sería un gran problema, no quiero volver a alejarme de mi hogar.
- ¿De verdad? ¿Vienes para quedarte?
- Es la idea.
- Al fin recibí mi regalo –dijo sonriendo mientras bajaba levemente la mirada.
- ¿A qué te refieres?
- Después que te fuiste… para mi cumpleaños todos los años como deseo al apagar las velas pedía que mi mejor amiga volviera, que volviera y no se fuera nunca más.
- ¿Estás hablando en serio? –el se limito a asentir algo ruborizado- ¡Que tierno! Pero cuéntame ¿Qué ha pasado durante estos 4 años? ¿De qué me he perdido? Y que ni se te ocurra responder “no mucho” porque te llegará un golpe de mi parte, en ninguna parte pudo haber pasado “no mucho” en 4 años.
- A ver… ¿Por dónde empiezo?
- ¿Qué te parece el principio?

Y así se sentaron los dos jóvenes, en aquella banca que siempre los albergó cuando eran pequeños, ahora los veía nuevamente reunidos, esta vez un poco más maduros, más grandes. Estuvieron charlando un poco más de una hora, él le contaba cosas que ocurrieron durante aquellos años, mientras ella contaba algunas anécdotas que le ocurrieron en USA… hasta que llegó la pregunta que le oprimió un poco el estómago a la castaña.

- ¿Y? ¿Qué tal los novios? –Preguntó Tyler de pronto
- ¿Novios? No nada…
- ¿Nada de nada?
- Nada de nada –afirmó la joven algo sonrojada, y así era… su amor por él seguía intacto y fue por eso que jamás le puso real atención a ninguno de los muchachos de la escuela, habían varios que andaban tras ella, pero en su corazón solo había espacio para Ty y sus hermosos rizos- Y… ¿Qué hay de ti? –ese fue el momento en que su corazón comenzó a latir un poco más lento simplemente por el temor de la respuesta que él daría.
- ¿Yo? Pues estuve un tiempo con unas chicas, pero ahora… -dudo sus siguientes palabras por un momento, para finalmente simplemente dirigirle una sonrisa a su acompañante.

Monique no sabía cómo interpretar aquello ¿ahora qué? ¿Estaba soltero? ¿Estaba con alguien?

- Pero ¿Sabes quiénes corren mejor suerte que nosotros en el amor? –dijo de pronto Tyler rompiendo el silencio que se había formado
- Ah pues no lo sé…
- Louis y Harry.
- ¿Ah sí? Con que encontraron una chica para ellos –Tyler negó con la cabeza- ¿entonces?
- Pues digamos que su “bromance” –dijo haciendo unas comillas en el aire al decir aquella palabra- se convirtió en algo serio y real.
- Tienes que estar de joda.
- Para nada, llevan alrededor de un año y medio oficialmente juntos.
- No te lo puedo creer.
- Tan solo créelo cariño… Es tan bueno tenerte devuelta.
- Te extrañaba un montón –se sincero Smith
- Y yo a ti.

La muchacha recostó su cabeza en el hombro de su acompañante y cerró los ojos, y es que quería disfrutar ese momento, había soñado tantas veces con volver a hacer aquello que no podía creer que al fin lo tenía nuevamente a su lado, que otra vez estaban juntos. Podían oír unos pájaros cantar en los árboles que había alrededor de aquella plaza, el día estaba perfecto, parecía como si reflejara el cómo se sentía Mina por aquel hermoso y tan ansiado reencuentro. Pero toda ésta perfección se vio arruinada por el repentino sonido que provino del estómago de ella, dando a entender claramente que se encontraba hambrienta.

- ¿Tienes hambre? –preguntó de pronto el chico
- ¿Qué me delató? ¿Mi cara o el que mi estómago sonara grotescamente?
- Creo que fue el hecho de que también tengo hambre e invitarte me sirve como una excusa para seguir charlando.
- Pues si… tengo hambre.
- Entonces vamos –dijo él parándose de la banca.

sábado, 4 de febrero de 2012

Inseguridades

Simplemente esta no es una buena noche, y siendo sincera no esta ni cerca de serlo... Es increible como en un par de horas la inseguridad se apodera de ti... Puede que sea una chica con mucha personalidad, pero tambien soy una con muchos miedos e inseguridades, capaz de caer con un "eres fea"  que ni siquiera 20 "eres hermosa" me pueden levantar, aunque claro, hay veces en que no afecta para nada, al menos no en el momento o eso intento aparentar y es que debes ser asi de vez en cuando, con el tiempo lo entiendes, en especial despues de que sufres de bullying psicologico.

En esos momentos es cuando mas duele ver como los demas se limitan simplemente a mirar y no son capaces de hacer nada... lo peor quiza fue cuando iba en busca de ayuda y practicamente me la negaban al decirme que tuviera pasciencia, que las soportara e incluso que las ignorara... pero si ignorar fuera tan simple no habria acudido por ayuda, no hubiera buscado una solucion ni mucho menos tratado de escapar.

Pero aunque intentes alejar las inseguridades, siempre llegas a un punto en que no puedes correr mas y te ves rodeado y sin salida... Con miedo de levantar el rostro y ser golpeado por la cruda realidad... Creo que en ese punto me encuentro ezn este momento, quiza en busca de un salvavidas que saque de todo esto, y si bien se quienes estaran alli, aun asi siento que no es suficiente, que algo falta, pero ni idea de lo que es.

...

[Perdon por la falta de tildes, pero estoy desde el tablet y no me da la opcion para ponerlos]

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miércoles, 18 de enero de 2012

~Todavía Te Amo - Sinopsis / Capítulo 1

Sinopsis:
Darte cuenta de que estás enamorada de tu mejor amigo no es fácil, mucho menos cuando estas por mudarte, irte a otro país y probablemente jamás volverlo a ver… pero lo que es más difícil aún es volver encontrarlo 4 años después para darte cuenta que lo sigues amando de la misma forma que lo hacías antes de irte.







Capítulo 1:
Monique Smith era una pequeña que vivía en una pequeña ciudad de Inglaterra, una muchacha de tan solo 14 años de cabellera de un tono castaño chocolate que ayudaba a resaltar sus hermosos ojos color pardo y para dar la pincelada final de su presentación, simplemente digamos que estaba enamorada de su mejor amigo, el susodicho chico se llama Tyler McCann, lo conoce desde hace ya demasiado tiempo y lo quiere demasiado, aquel muchacho de un cabello negro azabache con unos ordinarios ojos color café, pero que para la chica eran los más hermosos que había visto en toda su vida… El problema es que no que ella no se atrevía a decirle lo que sentía, tan solo por miedo a que su amigo no la correspondiera y probablemente jamás lo sabrá y todo gracias a que a su padre acababan de transferirlo en su trabajo, enviándolos a todos fuera del continente, obligándolos a cruzar el mar Atlántico hasta llegar a las costas de Estados Unidos para mudarse a la concurrida ciudad de Nueva York, y la verdad es que se iban con muy pocas probabilidades de volver en algún momento por una nueva transferencia, ella se iría y probablemente jamás lo volvería a ver. La chica no sabía cómo decirle que se marcharía, es decir, llevaban demasiado tiempo juntos como para poder separarse de la nada de un día para otro así nada más.

- Hey Monique-dijo una voz de pronto.
- ¡Tyler! –simplemente ella no esperaba encontrárselo en la plaza tan temprano.
- ¿Qué hay pequeña? –preguntó con aquella sonrisa que estaba siempre en su rostro.
- No mucho… al menos nada bueno.
- ¿Qué quieres decir?
- Tyler… me mudaré. –soltó sin más, sin saber cómo ablandar la noticia.
- Pero vamos, eso no puede ser tan malo ¿dónde te irás? ¿A los nuevos condominios que están construyendo?
- No… nada de eso.
- ¿Entonces?
- Ty –comenzó llamándolo por su apodo-, me iré a Estados Unidos.
- ¿¡Qué!? Debes estar de broma ¿no? –reaccionó el chico sin creer las palabras que acababa de oír.
- No –dijo triste mirando el suelo tratando de contener las lágrimas.
- Pero ¿cómo? ¿Cuándo? ¿Por qué?
- No lo sé… simplemente me lo dijeron mis padres hoy, nos vamos en dos semanas por el trabajo de papá.
- ¿Y cuando vuelves? Porque… volverás ¿cierto?
- No… no lo sé.
- ¡No! Mina –esta vez él ocupo el apodo de su pequeña amiga, uno que simplemente le había puesto un día sin importar si era un diminutivo de Monique o no- ¡No puedes dejarme! ¿Qué voy a hacer sin mi mejor amiga?
- Yo no quiero irme, de verdad que no.
- ¡Mentira! –Gritó de pronto el muchacho exaltado- si eso fuera verdad harías algo para no marcharte.
- Y ¿qué quieres que haga? Solo tengo 14 años.
- ¡No lo sé!
- ¡Pues yo menos! –Respondió parándose de la banca en la que estaba sentada. Se encontraba demasiado enojada, ella esperaba que su mejor amigo la apoyara, que la hiciera sentir mejor… no que le gritara y la culpara de la situación. Por lo que sin decir más se fue corriendo de aquel lugar en dirección a la que pronto dejaría de ser su vivienda, pero jamás dejaría de ser su hogar.




El día de partir había llegado, Monique no había vuelto a ver a Tyler después de aquella discusión que habían tenido en la plaza, y tampoco se habían llamado, siquiera para despedirse, pero cuando la chica se estaba subiendo al auto para irse camino al aeropuerto escuchó un grito que le llamó la atención, más que porque lo que gritaron fue su nombre, fue porque la voz que oyó era conocida, demasiado familiar.

- ¡¡Monique!!

Era Tyler que iba corriendo hacía el auto, en cuanto llego al lado de su mejor amiga simplemente Smith no soportó y se lanzó sobre él y mientras lo abrazaba muy fuerte, la emoción la inundó en un par de segundos y no pudo contener las lágrimas, no quería irse, estaba enamorada de su amigo y no quería alejarse de él por nada del mundo.

- Por favor… llévatelo, y no me olvides –dijo el joven McCann ofreciéndole un pequeño peluche de un osito con un corazón entre las manos que decía “Te quiero mucho”
- Yo también te quiero Ty –la chica no resistió el impulso y simplemente lo besó.

En una primera instancia él se quedó quieto, prácticamente congelado, pero al rato reaccionó y comenzó a devolverle el beso, lo único que pasaba en esos momentos por la mente de la joven Smith era “¡me lo respondió el beso!”.
- ¿Y eso? –preguntó Tyler en cuanto se separaron
- Para que no me olvides –fue lo que respondió la chica.

Después de aquello sin más la joven se eso subió al auto y se marchó, mientras se despedía por la ventana, hasta que simplemente lo perdió a su amigo de vista, entonces sin saber que más hacer se abrazó a aquel oso y simplemente se largó a llorar.



Desde ese día ya habían pasado 4 años, Monique había terminado sus estudios en Estados Unidos y ahora viajaba camino a Inglaterra, principalmente de vacaciones, aunque secretamente esperaba poder encontrar una universidad en donde poder estudiar una carrera profesional, realmente extrañaba su país natal… pero lo que más extrañaba era a su querido amigo Tyler, aún lo tenía presente en su mente, su peluche aún lo conservaba, lo llevaba a todas partes consigo, y si bien en USA había hecho muchas amistades, ninguno de ellos jamás llego a ser como su querido  Ty, ni siquiera se le acercaban.

Se quedaría en la misma casa en la que me crió, volvería a su hogar, ya que sus padres jamás la vendieron, ya que habían decidido dejarla de “reserva” para alguna emergencia o por si repentinamente había que volver a Inglaterra por el trabajo de su padre, aunque era poco probable, pero ella siempre mantuvo la esperanza de que aquello pasara, pero lamentablemente no ocurrió, pero los años habían pasado, ahora ya tenía 18 años y finalmente pudo viajar sola.

Se instaló con mis maletas y lo primero que hizo en lugar de darse una ducha o incluso dormir un rato después de aquel viaje fue ir a aquella plaza… aquella plaza que se ubicaba cerca de su casa, en la que tuvo tantos buenos momentos ya fuera con su familia o con sus amigos. El lugar estaba casi igual a cuando se había ido, solo que ahora tenía un par de juegos nuevos y algunos de los juegos que habían en ese entonces tenían unas capas nuevas de pintura mientras que otro simplemente habían desaparecido, pero todo era prácticamente igual a como lo recordaba.

Monique se sentó en una banca y se quedó mirando el cielo, había extrañado tanto este lugar…

- ¿Mina? –logró escuchar que alguien susurró
La chica se dio la vuelta y…

martes, 3 de enero de 2012

#Sola En Casa


“Estaré sola en casa todo el día ¿Por qué no me vienes a visitar?”
Son las palabras que bastaron en un pequeño mensaje de texto para que Chris Sumpter cancelara sus planes con sus amigos y partiera aquella tarde a casa de Rogers, sin darle mayores detalles a nadie simplemente desapareció en cuanto sonó el timbre que daba fin a las clases de aquel día, y es que había partido tras Paige camino a casa de la morena, la que se encontraría completamente vacía debido a que su padre tenía un viaje de trabajo, pero como el lugar también era un atractivo turístico su esposa había decidido acompañarlo, dejando a su joven y hormonal hija sola en casa.

- ¿Quieres comer algo? –preguntó la muchacha de ojos grisáceos.
- Solo a ti –respondió mientras la tomaba de la cintura para acercarla a él y morder el cuello de la joven, y es que ese era su punto débil, el cuello era aquel sector en el que con solo una caricia, un beso o en este caso una pequeña mordida provocaba cosas en todo su cuerpo.
- ¿Así tan rápido?
- Nena me has tenido dos semanas a pan y agua, no me hagas esperar más.
- Eres un adicto Sumpter.
- ¿Al sexo? Sí. –respondió jactándose de este hecho.
- No era un cumplido –dijo Paige mientras dirigía su mano hacia el sector donde se encontraba el miembro de su acompañante para comenzar a despertar sensaciones en él.
- ¿Entonces qué diablos era? –respondió simplemente dejándose querer por las caricias de su compañera.
- No lo sé, y de todos modos… ¿Importa?
- Sabes que no.
- Y qué tal un cigarro
- Tú si me conoces nena.

Las prendas poco a poco fueron desapareciendo, los cuerpos comenzaron a rozarse, sus manos, como si tuvieran vida propia comenzaron a recorrer el cuerpo del otro, el vaivén y las embestidas rápidamente comenzaron a provocar placer y la habitación se inundó en gemidos y suspiros, finalmente ambos llegaron al clímax y al contrario de cómo sería en cualquier relación real, al acabar simplemente Chris se levanto, se dirigió al baño, se dio una ducha, luego se vistió y por último se marchó sin más que hacer en aquel lugar y Paige hizo lo mismo, solo que luego de la ducha y volver a vestirse se dirigió a si escritorio y comenzó a hacer sus deberes como si nada hubiera pasado.

Y es que así eran ellos, sin una relación, sin un sentimiento real y palpable, solo sexo, solo algo casual.

lunes, 2 de enero de 2012

#Noche de Ron



Me encontraba envuelta por una sensación de recuerdo, a pesar de tener únicamente lagunas mentales en mi cabeza acerca de lo que pasó aquella ocasión…

Sábado en la noche, fiesta con amigos, bastante alcohol en el cuerpo, con el que apenas era consciente de lo que hacía. Lo que pasó después no logro recordarlo muy bien, pero hay algo que se grabó a fuego en mi memoria y es lo que más presente tengo, el sabor de sus labios, aquellos besos sabrosamente dulces debido a la gran cantidad de ron tomada durante el transcurso de la noche, después de eso todo es confuso. Tal vez solo fue por borrachera, quizá por necesidad e incluso soledad, pero la verdad es que fue algo de una noche y lo más probable es que no llegara más allá de eso.

Pero siendo sincera, no puedo negar que me gusto, fue una sensación especial, no porque aquel chico fuera especial, sino por el hecho de poder sentirme relajada, sin lazos, solo sexo, alcohol y diversión… a decir verdad tres cosas que quizá le hacían falta a mi vida; ¿Y si este tipo de relaciones era lo que necesitaba para despejarme un poco? No puedo ser una chica perfecta, esta sería la oportunidad de simplemente dejarme llevar, sin temerle a las represalias, disfrutar del otro y poder escoger sin compromiso, sin ataduras y sin obligaciones. Es posible que esto no sea correcto, que incluso sea la decisión equivocada y sólo una estupidez, pero que más da, mis hormonas me controlan más que mi cerebro y si las cosas salen mal se que tendré allí a mis amigos para ayudarme y apoyarme en todo lo que necesite.